Este espectáculo nace de un ejercicio compartido
por los intérpretes y la dirección.
El ejercicio es volver la mirada hacia adentro,
hacia el punto del ser y de la identidad,
a través del hecho de tener un nombre,
cosa que implica el ritual de una inscripción
en el espacio humano al nacer,
el derecho a ser nombrados y el derecho a la ceremonia
en el momento de la muerte.
¿Quién soy? ¿Quién sos? ¿Cómo te llamás?
Despedidas que no fueron posibles.
Preguntas que no fueron contestadas.
Nacer y vivir en Buenos Aires.
Éste es el ejercicio.
domingo, 10 de agosto de 2008
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